Cuando los años pasan y nuestras vidas se llenan de experiencias, nos preguntamos a veces si existe un lugar feliz en el mundo, en nuestro mundo, y la respuesta a tan compleja pregunta es que el único lugar feliz en el mundo se encuentra en nuestro corazón, el problema es saber escoger el camino para llegar a ese destino que a veces nos parece tan esquivo.

Lo importante de todo esto, es saber cuando estamos frente a la felicidad, ese instante en que la lucidez de nuestros pensamientos nos da la sabiduría necesaria para no dejar escapar lo que amamos, lo que siendo tan simple nos da una infinita alegría porque somos capaces de perdernos en el fondo de esos ojos que nos miran con amor, somos capaces de dejarlo todo por una honesta sonrisa, por el abrazo cálido y sincero, por la fortaleza de la amistad y la lealtad, por la dulzura del beso de un niño, por la dicha de vivir un día más. Y cuando encontramos ese lugar, una lluvia de sentimientos cae en nuestra cabeza.

Por todo eso si a mi me preguntan dónde está mi lugar feliz en el mundo, yo simplemente digo que está aquí, ahora, en mi espacio con mis vivencias y recuerdos, con lo que he aprendido, con lo que he reído y también llorado, con lo que he crecido, con los que amé y con los que amo, porque todo y todos forman parte importante de lo que ahora soy. Mi lugar feliz en esta en un punto exacto sino que esta en mi camino, en mi día a día, en lo que estoy viviendo justo ahora.